Laurie Anderson extiende su trabajo de fusión entre palabras y tecnología con la creación de una provocadora instalación/performance titulada ‘Habeas Corpus’, que demuestra la posibilidad de desenmarañar historias y sus interpretaciones, a través de un simple dialogo.
‘Habeas Corpus’ fue realizada en colaboración con Mohammed el Gharani (desde África), un ex prisionero Guantánamo. La obra fue presentada hace pocos días en el Park Avenue Armory de Nueva York.
Laurie Anderson imaginó la instalación en dos partes. En el primer cuarto puede verse el cuerpo de Mohammed el Gharani, que está presente gracias a un proceso de proyección llamado mapping. La imagen de Mohammed es 4 veces más grande que el original, y se lo ve en una pose como de estatua, inspirada en el Lincoln Memorial, en Washington D.C.
En otro cuarto, Mohammed aparece en una pantalla gigante, frente a varios bancos dispuestos para los visitantes. Esta presentación está filmada como un documental, donde el ex prisionero narra sus experiencias.
Antes de entrar los visitantes reciben un folleto que explica as circunstancias de la producción que están por presenciar, así como el contexto de la privación de la libertad de Mohammed el Gharani, entre sus 14 y 21 años, y la transcripción de sus historias.
El joven va contando su historia, sus experiencias a lo largo de esos años, pero sin entrar demasiado en detalles, ya que Laurie Anderson no quería hacer hincapié en ese aspecto.
Su único propósito es contar la historia a su modo, para probar cómo un testimonio, un interrogatorio, puede ser contado una y otra vez, y perder su sentido principal en el camino.
