Una nueva aplicación utiliza un robot para imitar la escritura humana con el fin de personalizar magníficas tarjetas para las personas que están demasiado ocupadas para escribirlas.
Bond forma parte de un servicio de app y regalos para gente con más dinero que tiempo, lo que efectivamente les permite enviar tarjetas escritas a mano desde su iPhone.
El robot imita la escritura humana usando movimientos fluidos y presiones diferentes para hacer que la letra cursiva luzca auténtica.
Las tarjetas robo-escritas son confeccionadas por Bond, una aplicación para iPhones y tablets de una empresa de regalos de lujo del mismo nombre, con sede en los EE.UU.
Imitar la escritura humana es engañosamente difícil. El robot debe adoptar cantidades similares a las humanas de presión sobre ciertas uniones y letras, quizás al ponerle el punto a la i, así como no borronear la escritura para que parezca auténtica.
Curiosamente el robot parece escribir desde la parte inferior hacia arriba de las páginas y de derecha a izquierda, o sea el camino opuesto de la composición de una tarjeta en el mundo occidental.
El servicio sólo está disponible actualmente en EE.UU., donde los clientes más pudientes pueden tercerizar la escritura de sus propias tarjetas, que cuestan USD 5.
Por el precio, los clientes reciben un mensaje de 255 caracteres en una tarjeta con relieve de oro sellada con cera, que se envía al destinatario deseado.
Bond se dedica principalmente a la venta de regalos, desde velas de diseño y chocolates a equipos deportivos vintage, y los usuarios pueden navegar por los regalos que pueden costar más de USD 250, para acompañar su nota escrita por el robot.
En el futuro, la compañía planea ofrecer una variedad de estilos de escritura, para que los clientes puedan escoger el que más se parezca a su propia letra cursiva, así como el despliegue de una aplicación para Android, y el sitio web convencional.
