Había sido aprobada la semana pasada en la Cámara de Representantes con 246 votos a favor y 183 en contra. En el Senado había obtenido 60 votos a favor y 38 en contra.
El presidente de los Estados Unidos Barack Obama firmó la puesta en marcha del plan de estímulo económico de 787.000 millones de dólares, el cual había sido aprobado la semana pasada después de una dura batalla en el Congreso. La intención del paquete es crear o salvar 3,5 millones de puestos de trabajo y según el mandatario se trata del “principio del fin”.
Este plan es el primer gran proyecto legislativo de Obama desde que asumió como presidente de los Estados Unidos y según el mandatario es el «más amplio paquete de recuperación» en la historia del país. La promulgación de la ley fue en un acto en el Museo de Naturaleza y Ciencia de Denver, Colorado.
Alrededor de 288.000 millones del plan se destinarán a rebajas fiscales, mientras que otros 144.000 millones se dedicarán a crear un fondo que alivie los problemas presupuestarios de estados y municipios. Además, 111.000 millones se dedicarán a inversiones en infraestructuras, 81.000 millones a prestaciones sociales, 59.000 millones a Salud, 53.000 millones se dedicarán a Educación y otros 43.000 millones a nuevas energías.
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