En el mercado de granos fue donde más se sintió ayer el primer día del séptimo paro que las entidades agrarias llevan adelante contra el gobierno de Cristina Fernández. La Mesa de Enlace y los manifestantes de base analizan extender la medida de fuerza una semana más.
Los controles de carga fueron efectivos en los más de 30 puntos en el interior del país donde los ruralistas se mantienen apostados a la vera de las rutas. En el primero de los siete días de huelga programados se frenó por completo la venta de granos.
La medida de fuerza sólo permite el paso de verduras, lácteos y animales para faena que provengan de zonas en emergencia. Sin embargo, los ganaderos enviaron ayer 12 mil cabezas a Liniers aunque, aclararon, un porcentaje es remanente de días anteriores.
Según el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Hugo Biolcati, la medida de fuerza – es el séptimo paro que el campo le hace a la administración de Cristina Fernández – es «un llamado de atención ante la falta de respuesta del Gobierno a los reclamos». Por su parte, Alfredo De Angeli, dirigente de Federación Agraria, en declaraciones radiales advirtió: «Si la Presidenta sale a provocar, en cinco minutos la gente está arriba de la ruta».
En tanto, volvieron a circular ayer versiones sobre la renuncia del secretario de Agricultura, Carlos Cheppi. Según consigan el diario Clarín en su edición del sábado, la ministra de la Producción, Débora Giorgi, desearía designar a un hombre de su sector.
Más información
www.criticadigital.com/impresa/index.php?secc=nota&nid=29922
www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1168279
www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-130790-2009-08-29.html
