miércoles 11 de diciembre de 2024
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Los consejos de una periodista para tener una relación más saludable con las noticias

Estar informados es parte del trabajo de los periodistas, pero muchas veces puede afectar a nuestra calidad de vida y el tiempo que compartimos con otras personas. La editora de Nieman Journalism Lab, Laura Owen, contó su experiencia en la que pasó ocho años leyendo noticias en su celular mientras estaba con sus hijos pero un día se dio cuenta de que esta adicción arruinaba sus relaciones y decidió cambiar sus hábitos de consumo de información. Su experiencia sirve como ejemplo para repensar nuestra relación con las noticias en la era digital.

La obsesión por estar actualizado puede transformarse en un problema serio. Despertarse a la madrugada para ver las últimas novedades políticas, ignorar a los hijos mientras se lee en el celular o distraerse durante la lectura de un cuento antes de dormir son señales de que algo no funciona bien. Aquí una serie de consejos basados en su propia experiencia que brinda Owen para mejorar el vínculo con las noticias.

Basta de consumir reacciones ajenas

El primer paso para solucionar este problema es limitar el consumo de reacciones ajenas a las noticias. Las redes sociales permiten ver capturas de pantalla con fragmentos indignantes, tuits fuera de contexto y opiniones constantes sobre cada novedad. Esta sobrecarga de información genera ansiedad y distrae de lo importante. La periodista también cuenta que por este motivo borró su cuenta de X (ex Twitter).

Volver al papel

Una alternativa es volver a los diarios impresos. Su principal ventaja es que son finitos: cuando se termina de leer, se acabó. No hay notificaciones ni actualizaciones infinitas. Esto permite procesar mejor las emociones que generan las noticias sin que interfieran con el resto del día. 

Horarios para informarse

También ayuda establecer horarios específicos para informarse. Aunque muchos periodistas sienten que deben estar actualizados las 24 horas, usualmente no necesitamos de verdad ese nivel de atención constante. Lo mejor es concentrar la lectura de noticias en momentos definidos. De ser posible, no leer antes de iniciar las tareas y cortar cuando se acaba la jornada laboral.

Elegir bien las fuentes

Es importante ser selectivo con las fuentes de información. Mantener suscripciones solo a medios y newsletters que realmente aporten datos interesantes o sorprendentes, y no a aquellos que repiten siempre el mismo mensaje aunque uno esté de acuerdo con ellos.

Estas son algunas prácticas que pueden servir para que las noticias no se metan en todos los espacios de nuestras vidas. Lo más importante es darse el tiempo para pensar cómo nos relacionamos con la información y encontrar nuestras propias maneras. El objetivo no es dejar de informarse, sino hacerlo de una manera más saludable. A veces, para disfrutar mejor de algo que nos gusta, necesitamos ponerle límites.

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