viernes 19 de abril de 2024
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Defender lo indefendible

Nadie debería incurrir en esa necedad. Sin embargo en Argentina se trata de una costumbre más extendida que el mate amargo. El acuerdo entre el gobierno nacional y el Correo Argentino es un escándalo. No hace falta entrar en la discusión sobre montos (según la fiscal hay una diferencia al día de hoy de unos 4 mil millones de pesos entre lo adeudado y lo que propuso pagar la empresa en cómodas cuotas y aceptó el Ministerio de Comunicaciones). Se trata de una condonación de deuda muy importante. Y la hace el gobierno de Mauricio Macri a la empresa de su familia.

Hay un problema jurídico (la Cámara debe resolver la impugnación que hizo la funcionaria judicial al considerar el acuerdo ruinoso e irresponsable), uno político (todo el arco opositor cuestionó el convenio) pero esencialmente se trata de un dilema ético. Más allá de la responsabilidad de la gestión anterior en la falta de resolución del tema durante años, está claro que no alcanza para justificar semejante concesión. Lo que más sorprende del tema Correo no es la ceguera oficial. Cerca del Presidente aseguran que esta decisión no implica costos políticos y que obraron de manera “transparente” para “solucionar un problema que les dejó el kirchnerismo”. Me impacta más la actitud de una legión de comunicadores que salieron en defensa del acuerdo.

El gobierno de Cristina Kirchner tuvo la principal usina de defensa de su gestión en los medios públicos. 678 fue el programa insignia de esa política. Se defendía desde la TV estatal hasta lo indefendible. No había allí ningún lugar para el pensamiento crítico. La derrota electoral de Daniel Scioli también fue abonada por esa necedad. Cambiemos cuenta con una multiplicidad de 678. “No hay tantos despidos”, “tomar deuda es positivo”, “Arribas es un funcionario probo y competente”, “el convenio con el Correo es necesario”. Van apenas algunos ejemplos. La única ventaja para todos es que la catarata de justificaciones no es solventada por fondos públicos. Por lo menos no en forma directa.