Venecia tiene 28 años, es administradora de empresas y llegó a Buenos Aires en noviembre de 2018 junto a su novio, mecánico de autos, buscando una mejor calidad de vida. En Caracas, les faltaban servicios básicos como el agua, todos los días se le cortaba la luz algunas horas, y su conexión a Internet era como máximo de 1 mega, casi prehistórica.
Dejó su país huyendo de un régimen político y cuando se radicó en Argentina se sintió no sólo segura, sino también feliz de poder ayudar económicamente a su familia desde el exilio.