Hace 30 años surgió una teoría que parece un contrasentido: existe un estado del agua que es sólido y líquido al mismo tiempo.
Según los científicos teóricos, el llamado hielo superiónico ayudaría a explicar el extraño campo magnético de Urano y Neptuno.
A lo largo de los años, muchos investigadores aportaron evidencia teórica, pero nunca experimental de su existencia.
Hasta ahora.