Los inversionistas de Uber han esperado pacientemente un retorno de ganancias. Sin embargo, a juzgar por el último informe trimestral, tendrán que esperar un poco más.
La app de transporte compartido que se ha expandido al reparto de comida a domicilio, ya lleva 10 años en un creciente mercado global y sigue perdiendo dinero.
Aunque su clientela de base ha crecido y sus ingresos han mejorado, el balance sigue siendo negativo.
Las últimas cifras destacan que sus ingresos subieron casi 30% hastaUS$3.810 millones pero sus pérdidas netas están en casi US$1.200 millones.