Una sala llena de amigos y familiares que no se han visto en mucho tiempo, se abrazan, se besan y celebran el reencuentro alrededor de una mesa llena de manjares.
Comparten horas juntos, se ríen, gritan, se pasan platos y cubiertos los unos a los otros, y se intercambian regalos.
Antes de 2020 esta podría ser una típica postal navideña.
Ahora es un escenario ideal para la propagación del coronavirus.
Por eso mismo, los expertos advierten que la única forma de evitar la transmisión del virus es renunciar a las celebraciones en persona.
En caso de que se hagan, todos los especialistas que BBC Brasil entrevistó recalcan que es imposible eliminar los riesgos de contagio, pero que hay medidas para mitigarlos.