Entre el cúmulo de información proveniente de la Argentina, hubo dos datos que encendieron las señales de alerta en Wall Street.
Una fue la última encuesta que la consultora Managment & Fit presentó ante algunos de los grandes bancos de inversión de Nueva York, y que le da a Cristina Kirchner ganándole a Mauricio Macri por nueve puntos en un eventual balotaje.
La otra se vincula con lo institucional, pero que tiene una única interpretación política: la tensión nada menos que entre Mauricio Macri y la Corte Suprema, ambos máximos exponentes de dos de los poderes del Estado.
Sobre esta última cuestión, la pelea pública entre el jefe de Estado y los jueces en torno a la suspensión del juicio oral y público a la expresidenta por una causa de corrupción dejó expuesto, a los ojos de los inversores, algo que ahora luce como evidente: que el ascenso en las encuestas de CFK termina por influenciar en la toma de decisiones de los jueces.