El Sindicato de Prensa de Buenos Aires elaboró un informe, en colaboración con los dos autores de esta nota, que plantea la problemática del presente y el futuro de la sostenibilidad económica de la producción periodística y cultural en el escenario de la convergencia. ¿Un impuesto para las plataformas? ¿Cuotas de contenidos locales y obligaciones de inversión? ¿Fondos para la producción periodística a cambio de cumplimiento de códigos laborales? ¿Todo eso y más? ¿Qué debe hacer el Estado?
Desde la consolidación del proceso de comunicaciones convergentes, las tendencias de las lógicas de producción, distribución, puesta en circulación y consumo de bienes y servicios culturales se ha desarrollado de tal modo que resulta clave una acción de los estados en pos de administrarlo con la lógica que garantice el derecho a la información en toda su dimensión.
La captura de la renta, el tiempo de atención y la propiedad de los productores de cultura e información por parte de capitales extranjeros es un fenómeno que antecede al proceso de convergencia digital. Sin embargo, este fenómeno se aceleró y profundizó a causa de la explosión de la intermediación de plataformas digitales de distinto tipo en la circulación, distribución y comercialización de contenidos. Hoy, Facebook, Google, Apple, Netflix, Disney y otras empresas, casi todas financiadas por capitales del mercado estadounidense, erosionan el financiamiento de la producción local de contenidos, capturan una parte cada vez más trascendente de la renta y regulan de facto la oferta y las capacidades de los usuarios para decidir qué información personal puede ser comercializada o no.