El ministro sigue evitando definiciones, pero sabe que su candidatura presidencial tiene vida propia y el reloj aprieta. Qué falta para que vea la luz.
Sergio Massa sigue afirmando, en sus conversaciones privadas, que no se ve como candidato presidencial este año. Sin embargo, el sí o el no llegarán cuando se conozcan los números de la inflación de abril y de mayo, a más tardar a mediados de junio. El 24 de ese mes vence el plazo para la presentación de las listas electorales; hasta entonces, suspenso… Sin embargo, para que prospere el plan «Massa 2023», que no es solo ni necesariamente suyo en un panperonismo que no tiene postulantes con proyección, el ministro de Economía necesita imperiosamente que el otoño venga fresco en materia de precios.
Cristina Fernández de Kirchner se ha excluido de cualquier postulación y parece improbable que dé marcha atrás después de haber dicho que no se va a amparar en fueros y de haber desafiado a sus enemigos a que la metan presa. Alberto Fernández, al revés de Massa, sigue diciendo que lo suyo puede ser, pero íntimamente sabe que su intención de ser reelecto está condenada en un 99%. Daniel Scioli quisiera volver a ser, pero lo suyo no parece tener gran sustento y Juan Manzur confirmó que dejará la jefatura de Gabinete para meterse en la pelea tucumana, abriendo una disputa por su herencia. Así las cosas, ¿quién?