Donald Trump puede pensar que él es la razón por la que las dos Coreas volvieron a dialogar por primera vez en más de dos años esta semana.
Pero puede que Kim Jong-un tenga una razón más práctica para mostrar una cara diferente a sus vecinos del sur, además de querer que su país participe en los Juegos Olímpicos de invierno.
Y esa razón es la economía.