El hartazgo por la política de cero covid de China ha provocado un estallido de protestas inédito en los últimos tiempos en el país.
Las manifestaciones que se han extendido por distintas ciudades de China han derivado en críticas al presidente Xi Jinping y al Partido Comunista chino, en una oleada de descontento muy poco habitual en un país donde la censura y la represión policial rara vez dejan ver signos de disidencia.
La furia de muchos ciudadanos chinos no es nueva, aunque ha sido en las últimas semanas cuando ese descontento ha empezado a cristalizar y extenderse por las principales ciudades del país.