Si hay algo que no les gusta a los economistas profesionales es que les muestren que sus pronósticos no se cumplieron, más allá de que haya habido factores imprevistos que justifiquen los desvíos.
Y si de algo sirven las encuestas -como la que realiza el Banco Central conocida como REM (Relevamiento de Expectativas del Mercado)- es para medir cómo fue cambiando la mirada de quienes participan en ellas en cuanto a la marcha de la economía, dólar, tasas, inflación, entre otras variables clave.
Sobre el cierre de un año y arranque del próximo, resulta interesante repasar cuáles eran esas proyecciones, comparar datos y ver quiénes más se acercaron a lo que finalmente terminó sucediendo.
Precios minoristas: expectativas «cortas»
En los albores de 2017, según el consenso del mercado, la inflación minorista iba a rondar el 21%.