No dormir lo suficiente puede conducir a un círculo vicioso de comer en exceso y a una mayor privación del sueño, pero puede ser posible crear un círculo virtuoso, en el que una alimentación saludable mejore el sueño.
A Tania Whalen le resulta imposible dormir lo suficiente, pues trabaja en las noches y madrugadas en la centralita de los bomberos en Melbourne, Australia.
Para soportar las largas noches respondiendo llamadas de emergencia y enviando equipos, a menudo llevaba refrigerios al trabajo.
«Podía ser un muffin o unas galletas para comer en un descanso porque me daba un poco de hambre o quería levantar un poco la energía», dice.