Los recientes anuncios de venta de derechos de sus canciones por parte de estrellas como Neil Young y Shakira tienen a un protagonista en las sombras: un ex mánager de Elton John y Guns N’ Roses que a través de su compañía Hipgnosis ha invertido miles de millones de dólares para adquirir cerca de 57 mil clásicos del pop y el rock. El alza del streaming, la pandemia e incluso la asunción de Biden en EE.UU. han propiciado una nueva fiebre del oro musical.
Algo grande está pasando en la industria de la música. Y al parecer sólo unos pocos parecen entender de qué se trata realmente.
La clave puede encontrarse en la unión de una serie de noticias sueltas que han aparecido en el último mes, con diversos famosos involucrados y un hasta hace poco desconocido personaje como gran ganador de la ecuación. Primero fue Bob Dylan, quien vendió todo su catálogo de canciones -que abarca más de 600 temas compuestos durante 60 años- a Universal Music Publishing Group, el ala editorial del sello multinacional de mismo nombre. Un acuerdo que se catalogó de histórico y cuyos términos financieros, según The New York Times, se acercan a los US$ 300 millones.