El deterioro de la deuda argentina, con bonos que tienen rendimientos cercanos al 20%, hace que el país esté dejando atrás (otra vez) un tren que difícilmente se vuelva a repetir: el del dinero barato que financia a casi todo el mundo (menos a la Argentina). El año pasado países y empresas de América Latina consiguieron en el mercado internacional de deuda casi u$s160.000 millones, según cálculos del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por sus siglas en inglés). Este miércoles Perú salió a buscar u$s4.000 millones con títulos hasta 30 años pagando tasas entre el 2% y casi el 4%. Pero no fue el único que ya arrancó.
Todo esto demuestra que aún, y a pesar de la suba de tasas a 10 años en EEUU, persiste el apetito por activos de América Latina. Ya en este 2021 siguió el boom por emergentes. Algunos ejemplos fueron los siguientes: