Enero largo y caliente en plena feria judicial, con pasillos casi vacíos en Tribunales, trabajo modo “home office”, chats telefónicos con expresiones medidas y mucha preocupación por la crisis institucional que deriva de la intención del Gobierno nacional de remover a los 4 jueces de la Corte Suprema.
Antes del fin de semana se enteraron que los diputados del Frente de Todos presentaron un proyecto para promover el juicio político del presidente del Máximo Tribunal, Horacio Rossati, y del resto de sus integrantes, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti, por la causal de mal desempeño, en los términos del artículo 53 de la Constitución Nacional.
En la iniciativa de más de 400 páginas los legisladores del oficialismo distinguen el juicio político del penal: “No es un juicio penal que persiga castigar, sino separar del cargo” a quienes incumpliesen con la Constitución.