En el equipo económico no hay lugar para las dudas: «Estamos frente a un punto de inflexión», asegura uno de los funcionarios clave a iProfesional. Remarca que el entusiasmo es justificado. Que las últimas novedades en la economía real y en el plano financiero resultan elocuentes: «Entramos a otra dinámica», define.
El optimismo intenta contrarrestar las malas expectativas que, hasta hace algunas semanas, eran mayoría en el «mercado». Con buena parte de las consultoras previendo una devaluación abrupta, que al menos por ahora el Gobierno logró esquivar.
Hubo dos datos clave que cambiaron el panorama en el equipo: las compras del BCRA del mes pasado -por u$s603 millones-, que dio vuelta la tendencia negativa de los meses precedentes. Y, en paralelo, los últimos registros de la industria y de la construcción.