¿Por qué, tres días después, seguimos hablando de empanadas?

El ajuste del gasto público conseguido en gran parte por la paralización de la obra pública tiene un fenomenal costo económico: para reconstruir la infraestructura deteriorada por la inacción del gobierno se necesitarán 1.4 billones de dólares, lo que equivale a dos veces y medio el Producto Bruto Interno, según datos que dio a conocer el área de pensamiento estratégico de la Cámara Argentina de la Construcción (CamArCo).

En la mesa de Mirtha Legrand, el actor puso en discusión el precio de una tradición criolla, el de la docena de empanadas. Pese a que -en la enorme dispersión existente en el mercado- el valor elegido por Darín estaba más cerca de un techo, la pregunta queda planteada: ¿está cara o no la Argentina?

🌎Mundo

La recién creada Fundación Humanitaria de Gaza, impulsada por Israel y respaldada por Estados Unidos para canalizar ayuda hacia la Franja de Gaza, anunció el lunes el inicio de la distribución de alimentos, pese a las fuertes críticas internacionales. Un día antes, su director ejecutivo presentó su renuncia, al considerar que el mecanismo no podía garantizar principios humanitarios esenciales como la neutralidad y la independencia.

Si usted quiere enriquecer su comprensión de lo que sucede en Estados Unidos, no sería mala idea asomarse a la prensa de Canadá: un país que, desde su privilegiada atalaya, observa desde muy cerca las vicisitudes de su vecino. El periodista Stephen Marche, nacido en Edmonton, en Alberta, es uno de los observadores más audaces y curtidos de un país al que adora, pero que desde hace unos años avanza, según sospecha, hacia la catástrofe. Marche, que ha pasado la mayor parte de su vida profesional en Estados Unidos, como profesor de estudios renacentistas, escritor y firma asidua de Esquire, The Atlantic, The New Yorker o The New York Times, ha dedicado mucho tiempo a analizar las brechas estadounidenses.

💡Ciencia y Tecnología

Aunque el desarrollo global de la robótica avanza a pasos agigantados, en Argentina su presencia en hogares y espacios de trabajo todavía es incipiente. Desde las primeras aspiradoras autónomas hasta robots humanoides como el G1, el país empieza a explorar un futuro donde estas tecnologías podrían transformar desde tareas domésticas hasta procesos industriales. Cuánto falta para que la ciencia ficción sea nuestra vida cotidiana.

Ante la incertidumbre inicial en las consultas de atención primaria, la mayoría de profesionales tiene intuiciones sobre el pronóstico de sus pacientes. Criticadas en ocasiones como acientíficas, varios estudios están empezando a calibrar su utilidad.

🎭Show y Cultura

Los padres japoneses ya no podrán elegir libremente los nombres de sus hijos tras la introducción esta semana de nuevas normas sobre la pronunciación de los caracteres kanji. El cambio pretende frenar el uso de nombres kirakira (brillantes o relucientes) que han proliferado entre los padres deseosos de añadir un toque creativo a los nombres de sus hijos, creando quebraderos de cabeza administrativos a las autoridades locales y, en algunos casos, provocando las burlas de los compañeros de clase.

Durante más de siglo y medio, The Economist ha mantenido una de las normas editoriales más singulares del periodismo anglosajón: ningún artículo va firmado. La redacción se presenta como una única voz coral que transmite el análisis con una autoridad institucional, sin resquicios para el ego del autor ni para el lucimiento personal. Esa apuesta por el anonimato ha reforzado su prestigio como publicación de referencia en asuntos económicos, políticos y científicos. Pero en un ecosistema mediático donde los nuevos formatos digitales exigen vínculos personales más nítidos, esa tradición ha empezado a tensionarse.

😺Lo mejor de las redes

¿Qué se esconde detrás de esta avalancha de productos de pésima calidad que se ofrecen en las redes sociales? Plataformas privadas de dropshipping a contrareembolso que te enseñan cómo hacer que tu lámpara linterna se viralice y que te animan a que le infles los precios a los productos, cursos que cuestan fortunas y que no sirven para nada, muchísima gente furiosa que dice sentirse estafada y demasiados gurús con muchísimos Lamborghinis y ninguna vergüenza.

Así se llama este Honda Civic EG funcional, presentado en Taiwán, que se ganó el título de «el auto más bajo del mundo». El proyecto fue desarrollado por el equipo Stance Garage Taiwan (SGT), y su responsable principal, Lan Dong, lo pensó como una creación para exhibiciones automotrices. A simple vista, da la impresión de que el auto está parcialmente sumergido en el suelo, con apenas el techo, los vidrios y parte del capó visibles

¡Hasta mañana!