Al cumplirse un año de las revueltas de los inmigrantes e hijos de inmigrantes en los suburbios franceses, se produjeron nuevos incidentes en las calles, pero el Gobierno asegura que la noche del viernes fue de “relativa calma”.
Hace apenas un año, decenas de miles de jóvenes inmigrantes, la mayoría de nacionalidad francesa, salieron a las calles para reclamar la igualdad de oportunidades y rechazar la segregación racial, que hizo explosión con la muerte de dos jóvenes de origen árabe que fallecieron electrocutados al intentar escapar de la policía.
En aquella oportunidad se manifestaron en las principales ciudades y destrozaron autos, vidrieras y edificios públicos, miles fueron detenidos y varios cientos resultaron heridos. Por eso, se temía que al cumplirse el aniversario se registraran nuevos desmanes.
Sin embargo, el Ministerio del Interior informó que durante la noche del viernes sólo se registraron unos pocos disturbios, casi todos en París, donde 25 personas fueron detenidas y quedó como saldo una veintena de automóviles y dos colectivos incendiados.
En diálogo con la BBC, el periodista francés Lemoine Maurice, de Le Monde Diplomatique, intentó explicar la situación: “El gobierno no aprendió mucho de lo que sucedió hace un año en Francia porque el problema es más que todo social, y amerita medidas importantes. Por ejemplo, un plan social para reducir el desempleo en estos barrios”.
Más información:
www.elpais.es/articulo/internacional/elpporint/20061028elpepuint_4/Tes/
www.elmundo.es/elmundo/2006/10/28/internacional/1162024417.html
news.bbc.co.uk/low/spanish/international/newsid_6088000/6088554.stm
