El Congreso aprobó anoche una ley que busca resolver la situación de los deudores hipotecarios que tomaron préstamos en escribanías y financieras para viviendas familiares de hasta cien mil pesos, y que fueron afectados por la devaluación de 2001.
El texto que se aprobó establece plazos máximos de hasta 45 días para cancelar las deudas incluidas o no en el fondo fiduciario del Banco Nación, con un tipo de cambio aproximado de $ 1,83 pesos por cada dólar adeudado.
La ley establece una instancia de conciliación entre acreedor y deudor, pero, de persistir los desacuerdos entre las partes, prevé un mecanismo para que la deuda pueda ser calculada por la justicia.
Los beneficiados con esta ley serían unos 1.500 deudores hipotecarios, pero quedan afuera los deudores bancarios, calculados en 85 mil.
El proyecto recibió el apoyo de 129 legisladores, pero el ARI, PRO y el justicialismo nacional (25 votos) se pronunciaron en contra.
Los diputados de PRO Federico Pinedo y Jorge Vanossi (Capital) argumentaron su oposición de este modo: «No es admisible que se dicten leyes que traben o impidan la acción regular del Poder Judicial. Ello vulnera de forma dramática la seguridad jurídica que es una obligación del Estado preservar», afirmaron.
Más información:
www.lanacion.com.ar/EdicionImpresa/economia/nota.asp?nota_id=857125
www.lacapital.com.ar/2006/11/09/politica/noticia_341540.shtml
www.clarin.com/diario/2006/11/09/sociedad/s-04201.htm
