A partir de las renuncias del subdirector de la Biblioteca Nacional, Horacio Tarcus, y de la historiadora Hilda Sábato, integrante del Consejo consultivo, se desató una grave crisis en la institución.
Un grupo de reconocidos intelectuales e investigadores ayer hicieron pública una carta dirigida al secretario de Cultura de la Nación, José Nun, donde defienden «el certero diagnóstico sobre el sombrío estado de la Biblioteca Nacional que detalla Horacio Tarcus en su renuncia, lo que cada uno de nosotros puede avalar por su propia experiencia como lectores e investigadores».
Entre los firmantes aparecen Luis Alberto Romero, Sylvia Saítta, Beatriz Sarlo, Silvia Sigal, Oscar y María Terán, Mirta Varela, Diana Wechsler, Susana Zanetti, José Emilio Burucúa, Adrián Gorelik, Claudio España, Fabio Espósito, Rafael Filippelli, Silvia Finocchio, Andrea Giunta, Mónica Gluck, Marta Goldberg, Rosana Guber, Alejandro Katz, Ignacio Llovet, Eduardo Migues, José Miguel Onaindia, Felipe Pigna, Irina Podgorny y Sergio Pujol.
El motivo de la renuncia de Tarcus, un reconocido archivista que llevaba a cabo varios programas bibliotecológicos en el organismo, tendría que ver con el rechazo de los proyectos de modernización presentados ante Horacio González, actual director de la biblioteca.
Más información:
www.clarin.com/diario/2007/01/04/sociedad/s-04201.htm
www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/2-4986-2007-01-04.html
www.lanacion.com.ar/EdicionImpresa/cultura/nota.asp?nota_id=872443
