Las autoridades chinas y tibetanas iniciaron este domingo la ronda de negociaciones para terminar con los enfrentamientos que desde hace dos meses se registran en el Tibet. Beijing dijo que sólo habrá un resultado positivo si se logra un claro rechazo a cualquier actividad separatista.
Entre hoy y el miércoles, las autoridades chinas y los enviados del Dali Lama discutirán en Shenzhen las formas de llegar a un acuerdo consensuado que termine con la violencia en el Tíbet. El presidente chino, Hu Jintao, dijo que «espera un resultado positivo» de este encuentro.
Hu también llamo a que el líder espiritual tibetano muestre «mediante obras» que rechaza las «actividades separatistas» y la «incitación a la violencia», y que sólo así se crearán las condiciones necesarias para el diálogo. Según anticipó el primer ministro tibetano, Samdhong Rinpoche, no se conocerán pormenores de las negociaciones hasta el miércoles, día en que retornen a la India (sede del gobierno en el exilio) los representantes del Dalai Lama.
Desde hace dos meses se registran violentos choques entre el ejercito chino y la población tibetana, que ya se han cobrado la vida de al menos 20 personas reconocidas oficialmente por Beijing (el gobierno regional en el exilio eleva esa cifra a más de 100). China considera al Tibet como una provincia rebelde y rechaza sistemáticamente sus pedidos de autonomía.
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www.lavanguardia.es/lv24h/20080504/53460590539.html
www.elmundo.es/elmundo/2008/05/03/internacional/1209806908.html
www.elpais.com/articulo/internacional/elpepuint/20080503elpepuint_7/Tes
