Fueron atacados cuatro cuarteles policiales. Frente a uno de ellos explotó un coche bomba.
Se produjeron en la ciudad paquistaní de Lahore cuatro ataques simultáneos contra locales de la Policía los que ocasionaron la muerte de más de 30 personas. Horas después de los atentados el ejército aseguró que ya tomó el «control total» de la situación en esta ciudad, la cual es la segunda en importancia del país.
Ayer fue atacada la sede de la policía de investigación criminal (FIA) por al menos cinco hombres armados, de los cuales tres pudieron ingresar al edificio. A la vez, otros dos grupos atacaron el centro de entrenamiento de los comandos de elite de la policía en Bedian, y el centro de entrenamiento de reclutas de la policía en Manawan.
Por otra parte, delante de un puesto policial en Kahot se produjo el estallido de un coche bomba lo que les causo la muerte a once personas, entre ellas tres policías. Estos ataques tienen lugar cuatro días después del asalto de 10 talibanes disfrazados de soldados contra el cuartel general del ejército en Rawalpindi.
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www.elmundo.es/elmundo/2009/10/15/internacional/1255581791.html
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