Ante la posibilidad de la pérdida de sus fuentes laborales, algunos obreros permanecen en el interior de la planta de Quilmes. La papelera venía funcionando con administración del Gobierno nacional, pero desde el lunes ya no produce.
Los empleados aclararon que la planta no está tomada y que decidieron permanecer en su interior para evitar que la cierren y se apague la caldera, ya que volver a encenderla tardaría un mes.
Desde el lunes que la producción está parada. Según indicaron los propios trabajadores, ahora se presentó Fernando López, el representante del fideicomiso a través del cual el Gobierno nacional venía gestionando la empresa, anunciándoles que ya no hay más plata para los sueldos, lo que significaría el cierre de la planta.
Cuando la papelera Massuh entró en cesación de pagos, el Gobierno se hizo cargo de su administración para evitar el cierre y la pérdida de puestos laborales. Al frente quedó el secretario de Comercio, Guillermo Moreno. Sin embargo, la fábrica ya no recuperó su producción habitual.
Frente a la quiebra de la empresa Massuh, la planta habría quedado ahora entre los bienes a liquidar. El Gobierno propuso a los trabajadores conformar una cooperativa de trabajo – lo cual hasta ahora no fue aceptado – y le pidió al sindicato que facilite una lista de los empleados que podrían entrar en un programa de retiro voluntario o jubilaciones anticipadas. Están en juego alrededor de 500 puestos laborales.
Más información
www.clarin.com/diario/2010/05/08/elpais/p-02192916.htm
www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1262474
www.elsolquilmes.com.ar/noticias.php?n_id=32718&edicion=786
