Un charco de agua que tiene su propia cuenta de Instagram

Un charco gigante en la ciudad rusa de Yuzhno-Sakhalinsk, en el Lejano Oriente, está siendo descrito como «invencible», después de que de alguna manera sobreviva sin reparar durante más de un cuarto de siglo. Ahora tiene su propia página de Instagram, y más de 16.000 seguidores.

Como sucede a menudo en Rusia y otros países de Europa del Este, lo que comenzó como un pequeño bache se convirtió gradualmente en un charco gigante. Alcanzó ese rango en 1994, y los lugareños han estado tratando de que las autoridades locales lo arreglen desde entonces. Hasta ahora el esfuerzo ha resultado inútil, ya que las reparaciones programadas se han pospuesto repetidamente.

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Mientras tanto, un frustrado vecino conocido solo como Nikolay, decidió que el bache de 25 años era lo suficientemente mayor como para tener su propia página de Instagram, y creó una para él en septiembre. Las ingeniosas y sarcásticas publicaciones creadas en primera persona rápidamente se volvieron virales, y consiguieron que el gobierno local finalmente actúe.

«¡Hola a todos! Soy el charco cerca de la calle Tikhookeanskaya 10, Yuzhno-Sakhalinsk. Acabo de cumplir 25 años, ¡es hora de conquistar Instagram como un adulto! :)” rezaba la primera publicación del charco. Fue un buen comienzo, pero solo el primero de una serie de divertidas publicaciones que tomarían por asalto la red social y las autoridades locales.

En solo cuatro días desde su creación, la página del famoso charco recibió más de 3.000 visitantes, y después de aproximadamente una semana, había recibido tanta atención online, e incluso en los principales medios de comunicación rusos, que las autoridades de Yuzhno-Sakhalinsk no tuvieron más remedio que hacer algo al respecto.

Curiosamente, después de que los vecinos pidieran al gobierno local que arreglara el charco gigante en 2014, el trabajo se pospuso para 2017 y luego para 2024, por lo que la intervención fue claramente una señal de desesperación. Pero en lugar de simplemente encubrirlo para siempre, optaron por una solución temporal.

«Se parece muchísimo al barro seco que se ha trabajado con equipo pesado de construcción», comentó el charco en su página de Instagram, y agregó: «nos veremos de nuevo durante la próxima tormenta».

La predicción del charco fue correcta, y la siguiente lluvia fuerte fue suficiente para que el charco volviera a la vida, más grande que nunca y ansioso por anunciar su regreso en las redes sociales.

«¡Qué pasa! ¿Me extrañabas? Yo también los extrañé a todos”, escribió el charco en Instagram. “Tanto, que incluso ese extraño espacio en blanco con el que intentaron cubrirme no pudo detenerme. Hoy es un día lluvioso maravilloso, así que, si alguien quiere venir, ¡con mucho gusto le daré la bienvenida! ¡Nos divertiremos, hay suficiente de mí para hacerme selfies con todos!»

A fines de octubre, el charco de 25 años de Yuzhno-Sakhalinsk se había convertido en una sensación en las redes sociales, con YouTubers e influencers rusos viajando a la ciudad para tomarse fotos con él, o usarlo como un telón de fondo para bocetos.

En noviembre, las autoridades de Yuzhno-Sakhalinsk volvieron a abrir el molesto charco, lo vaciaron y volvieron a llenarlo con el mismo «barro seco». Luego, las temperaturas comenzaron a bajar y eso ayudó a mantenerlo en hibernación, al menos hasta la primavera. Pero se dice que las reparaciones permanentes que se retrasaron hasta 2024 estaban programadas para el próximo año, para evitar que los funcionarios se sientan más avergonzados.

Los fanáticos del charco de 25 años estarán felices de saber que lo más probable es que el charco también sobreviva en 2021. A principios de este mes, el charco llevó a Instagram para agradecer a Sergei Vyacheslavovich Dmitriev, el jefe de la Duma de la ciudad de Yuzhno-Sakhalinsk por no incluirlo en la lista de reparaciones importantes para el próximo año.

“Mis queridos amigos, si, como yo, están abrumados de gran alegría en relación con esta noticia, entonces no deben contenerse”, publicó el charco. «Puede expresar personalmente su gratitud a Sergei Dmitriev por tal preocupación por preservarme en mi estado actual».

La historia del charco ruso de 25 años continúa, y a este ritmo, bien podría convertirse en el charco más antiguo de la historia.