Tres populares influencers rusos fueron condenados recientemente a pasar más de tres años en una colonia penal, por bromear con el conductor de una empresa de viajes compartidos pretendiendo robar su automóvil.
En marzo de 2021, los tres vloggers decidieron hacer otra de sus populares bromas, y luego publicar las imágenes en las redes sociales. Llamaron a un taxi tipo Uber, y dos de ellos subieron al auto y le pidieron al conductor que ayudara a su amigo a cargar algo de equipaje en el maletero.
Cuando el conductor salió del vehículo, uno de ellos se puso al volante y se marchó. Todo fue captado por la cámara por uno de sus cómplices, que estaba filmando desde unos metros de distancia, solo que, para el conductor, esto parecía un robo real, por lo que para cuando los vloggers trajeron el auto de regreso y explicaron que todo había sido una broma, la policía ya había sido notificada… Y la broma no les pareció divertida en absoluto.
«Dumshebay E., Tusupov A., y Khasanov RN fueron declarados culpables de cometer un delito en virtud del párrafo 2 del artículo 166 del Código Penal de la Federación de Rusia, y fueron condenados a una pena de prisión real, por un período de tres años y seis meses, para cumplir castigo en una colonia penal de régimen general”, dictaminó un tribunal el jueves pasado.
Ayin Tussupov, que actualmente tiene más de 1.2 millones de seguidores solo en Instagram, fue nombrado como uno de los tres influencers sentenciados la semana pasada. Él y los otros dos blogueros probablemente serán enviados a un campo de prisioneros a unos 500 kilómetros de Moscú.
Ramir Khasanov, uno de los tres influencers sentenciados en este caso, ya había desatado la polémica en marzo del año pasado, en pleno apogeo de la pandemia Covid-19, cuando bromeó con los pasajeros del metro de Alma-Ata tosiendo y llevándose una servilleta llena de sangre a la boca.
En fin, como dice el popular dicho, “jugar juegos estúpidos, lleva a premios estúpidos…”.