domingo 19 de mayo de 2024
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Gobierno japonés se moderniza y permite usar signos de interrogación y exclamación

El gobierno japonés tiene algo llamado kouyoubun sakusei no youryou, o “Pautas para la composición escrita oficial”. Se trata básicamente de un conjunto de protocolos de escritura para documentos gubernamentales y comunicados, y no se ha actualizado en mucho tiempo. La última revisión ocurrió en 1952, cuando se permitió oficialmente que los documentos se escribieran horizontalmente en lugar de la orientación vertical más clásica del texto japonés.

Pero después de 70 años, el Ministerio de Educación, Cultura, Deportes, Ciencia y Tecnología ha decidido hacer algunos cambios, y uno de los más grandes es dar permiso oficialmente a los trabajadores del gobierno japonés para usar signos de interrogación y exclamación.

Hasta ahora, las directrices no mencionaban signos de interrogación ni de exclamación, lo que implicaba que, en principio, ninguno de ellos debía utilizarse. Eso puede parecer un gran obstáculo para la comunicación escrita, pero ninguno de los signos de puntuación es autóctono del idioma japonés, por lo que existen otras formas de expresar los conceptos.

Por ejemplo, cuando se formulan preguntas en japonés, la sílaba ka se agrega al final de una oración, por lo que escribir ka, か en la escritura fonética hiragana del idioma japonés, transmite que se está haciendo una pregunta.

Sin embargo, las directrices actualizadas, que fueron redactadas por el Consejo de Asuntos Culturales del Ministerio, reconocen que hay ocasiones en las que la inclusión de un signo de interrogación o de exclamación puede aclarar el significado o la emoción de una oración, como, por ejemplo, expresar una conversación por escrito, por lo que ahora están autorizados para su uso en documentos, avisos públicos y campañas de sensibilización pública/relaciones públicas.

El Ministerio anunció las nuevas directivas la semana pasada, y si bien admite que los signos de interrogación y exclamación ya habían comenzado a aparecer en las redacciones del gobierno, ahora tienen la aprobación oficial.

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