Tras el escándalo en Italia porque la Iglesia se negó a ofrecer funerales cristianos a un tetraplégico que decidió morir por eutanasia, el Papa Benedicto XVI condenó esa práctica durante la misa de Angelus previa a la Navidad.
Piergiorgio Welby tenía 60 años de edad, había quedado tetraplégico y lo mantenía con vida un respirador artificial desde 1997. Finalmente decidió ser desconectado y falleció la semana pasada despertando un nuevo debate sobre la posibilidad de elegir la hora de la propia muerte.
La Iglesia se negó a dar cristiana sepultura al hombre por considerarlo un “suicida”. “La voluntad de Piergiorgio Welby de poner fin a su vida, afirmada de manera repetida y pública, es contraria a la doctrina católica”, sostuvo la Institución en un comunicado.
Durante la misa de Angelus previa a la Navidad, Benedicto XVI reafirmó esas palabras asegurando: “El nacimiento del Cristo nos ayuda a tomar conciencia de lo que vale la vida humana, la vida de todo ser humano, desde su primer instante hasta su declinación natural”.
En el mismo sentido, el Pontífice pidió a sus decenas de miles de seguidores apostados en la Plaza de San Pedro que recen para que llegue el “alivio y consuelo” a aquellos que pasarán las Fiestas “en la tristeza, la soledad, la enfermedad y el sufrimiento”.
Más información:
www.lanacion.com.ar/cultura/nota.asp?nota_id=870284
www.clarin.com/diario/2006/12/24/um/m-01333659.htm
www.perfil.com/contenidos/2006/12/24/noticia_0008.html