El paro del transporte sigue haciendo sentir sus consecuencias en Francia, mientras gobierno y sindicatos se aprestan a negociar.
La huelga se declaró como protesta por el plan de reforma previsional que propone el presidente Nicolás Sarkozy. Lo cierto es que la magnitud de la medida ocasionó severas demoras a los usuarios que iban a sus trabajos.
Ahora se pondrá en marcha un mecanismo trilateral para negociar, según anunció François Fillon, el primer ministro. Los 3 puntos son “innegociables•, según este, y aluden a los cambios que se harán a la polémica ley, propuestos por el propio gobierno.
En principio aumentará el período de cotización que otorga derechos a la pensión completa en los regímenes especiales, equiparándose con el sector privado. Los otros puntos son que los regímenes evolucionarán de acuerdo a la inflación, como en el sistema general, y que se multará a aquellos que se jubilen antes de tiempo. «Todo lo demás es negociable», agregó Fillon.
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