El subprefecto Héctor Febres, contra quien se iba a dictar sentencia el próximo viernes, apareció muerto en su celda, en una delegación de la Prefectura en el Tigre.
Febres estaba siendo juzgado por 4 casos de secuestros y torturas en la ESMA durante la dictadura. Era el primer marino sometido a proceso por los hechos acaecidos en ese centro clandestino de detención, desde la anulación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida.
«En caso de comprobarse que la muerte no fue natural, estaríamos frente a un caso de gravedad institucional que implica a toda la Prefectura», aseguraron los abogados querellantes. Uno de los damnificados, Carlos Lordkipanidze, reclamó que se haga la autopsia cuanto antes. Eso se haría hoy.
Con su muerte, y de acuerdo a la ley vigente, se detiene toda acción penal. La querella había pedido 25 años de cárcel.
www.clarin.com/diario/2007/12/11/elpais/p-03001.htm
www.lanacion.com.ar/EdicionImpresa/politica/nota.asp?nota_id=970060