Disponía 14.000 millones de dólares para evitar la quiebra de Chrysler, General Motors y Ford. Obama y Bush apoyan la iniciativa.
Finalmente luego de arduas tratativas entre demócratas y republicanos, el Senado estadounidense rechazó el plan de ayuda a las automotrices que exige el presidente electo Barack Obama. Esta medida complica a las empresas Chrysler, General Motors y Ford –en menor medida a esta última-.
«Podríamos pasar toda la noche, mañana, el sábado y el domingo y no lograríamos un acuerdo», dijo anoche el líder de la mayoría demócrata, Harry Reid. El proyecto de ley prevé créditos puente por un total de 14.000 millones de dólares para que los tres gigantes de Detroit puedan sobrevivir hasta el 31 de marzo próximo, mientras preparan un programa para reestructurar sus fábricas.
Además de Barack Obama, el presidente saliente George Bush apoya el plan de ayuda. Ambos consideran que la quiebra de estas tres empresas agravaría la recesión ya en curso y llevaría la tasa de desempleo a dos dígitos.
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www.clarin.com/diario/2008/12/12/um/m-01820819.htm
www.elpais.com/articulo/internacional/elpepuint/20081212elpepuint_6/Tes
