Un hombre hizo detonar un cinturón de explosivos en una reunión de oficiales de este cuerpo de élite del ejército. El ataque se lo adjudicó un grupo rebelde de la minoría sunnita.
En la jornada del domingo se produjo un atentado contra la poderosa Guardia Revolucionaria de Irán que dejó como saldo 35 muertos, entre los que figuran siete comandantes y varios líderes talibanes. Según la versión oficial, un hombre se inmoló al hacer estallar un cinturón de explosivos en medio de una reunión de oficiales de este cuerpo de élite del ejército.
Por su parte, Teherán acusó del atentado a los Estados Unidos, aunque fue reivindicado por un grupo rebelde de la minoría sunnita. Además, trascendió que fueron dos explosiones simultáneas, una en la reunión y otra destinada a un convoy de miembros de la guardia que se dirigían al encuentro, aunque este rumor no ha sido confirmado.
Se trata de un atentado sin precedente que le quitó la vida a varios de los jefes de los Guardianes, entre ellos el general Nour Ali Shushtari, adjunto al comandante de la infantería de los Guardianes de la Revolución, y el general Rajab Ali Mohammad Zadeh, comandante para Sistan-Baluchistán. El grupo rebelde que se adjudicó el ataque pertenecería a la minoría sunnita Yundalá (Ejército de Alá), al que se vincula con la red terrorista Al Qaeda y con el movimiento radical afgano talibán.
Más información
www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-133709-2009-10-19.html
www.clarin.com/diario/2009/10/19/elmundo/i-02021700.htm
www.bbc.co.uk/mundo/internacional/2009/10/091018_0908_iran_ataque_gtg.shtml
