Se trata de los que beneficiaban a las empresas de telefonía móvil, bancos, seguros, juegos de azar, aeropuertos y minería y petróleo. El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, y su par de Economía, Amado Boudou, aseguraron que no afectará a las tarifas finales al consumidor.
El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, y su par de Economía, el electo vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, anunciaron un plan de reducción de subsidios a un conjunto de actividades empresarias, lo que representará un ahorro de 600 millones de pesos.
El proceso se hará a través de una Comisión conjunta, integrada por el Subsecretario de Hacienda, Raúl Riggo y el subsecretario de Coordinación y Control del Ministerio de Planificación, Roberto Baratta, mediante la cual revisarán el régimen de subsidios, con el objetivo de analizar si «mantenerlos, reencauzarlos o eliminarlos», de acuerdo a lo explicado por Boudou.
Así, ambos funcionarios adelantaron que se eliminarán los subsidios a los bancos y financieras; a los juegos de azar; a los aeropuertos internacionales (principalmente Ezeiza y Aeroparque); a los puertos fluviales de pasajeros; a la telefonía móvil de jurisdicción nacional; a las minas y a la extracción de hidrocarburos.
«Esto es el comienzo de un proceso de análisis, pero no hay ninguna razón en la estructura de costos para que el costo de los subidos se traslade al servicio de final que se presta», aseguró De Vido, y argumentó sus dichos en que todos los sectores que sufrirán la reducción de subsidios gozan de «alta rentabilidad».
