Brasil 2014 igualó a Francia 1998 como el torneo con mayor cantidad de goles de la historia de los mundiales. Se anotaron un total de 171 en 64 partidos.
Esto se compara con los 145 en 64 partidos de 2010 o los 147 en 64 de 2006. Si se hubiera sostenido el promedio de 2,75 goles por partido de la primera ronda y octavos de final, hubiera superado a su antecesor francés. Pero aún con goleadas como el 7 a 1 de Alemania a Brasil, la cantidad de empates y resultados trabados de un fútbol muy parejo, hicieron descender ese promedio llegando al 2,67 goles por partido finales.
De los 154 goles hasta la etapa de octavos, 19 llegaron en los últimos cinco minutos del partido. También hubo ocho remontes (equipos que iban perdiendo y terminaron ganando), igualando el récord establecido en Copas del Mundo con 32 equipos (desde 1998).
La fase de octavos de final, sin embargo, ha dado menos resultados inesperados que la fase de grupos. Todos los equipos que terminaron primeros en su grupo -los favoritos, al menos en teoría-clasificaron para cuartos.
Sin embargo, eso no quiere decir que faltó drama. Cinco de los ocho partidos de octavos fueron a tiempo extra, y dos de ellos se decidieron por penales.
Después de las salidas tempranas de los ex campeones del mundo como Italia, España e Inglaterra, los pesos pesados restantes parecen estar encontrando sus pies. Todavía hay cuatro equipos de la Copa que han levantado el trofeo al menos una vez: Brasil, Argentina, Alemania y Francia.
Curiosamente, los cuartos de final se dividen en partes iguales entre América y Europa, con cuatro equipos restantes de cada continente. Sin duda el tapado del Mundial es Costa Rica, que además de eliminar a Grecia en octavos, venció a los ex campeones Italia y Uruguay en la fase de grupos.
Las semifinales fueron prolijas en cuanto a distribución geográfica y lo mismo pasó con la Final. Lo que en un principio pareció un Mundial de revelaciones futbolísticas y sorpresas se fue acomodando llegando el desenlace. Brasil – Alemania y Argentina – Holanda marcaban la posibilidad de la Final que efectivamente se jugó de un equipo americano contra uno europeo. Por primera vez en la historia, un equipo del viejo continente salió campeón en América.