“¿ Existe un parto mejor que otro? Definitivamente no, cada una elige. Pero sin duda el peor parto es el que nos anula, el que acatamos sumisas, con miedo a expresarnos, en el que recibimos órdenes, en el que nuestro cuerpo es un objeto, en el que no importamos. ¿ El mejor? Dependerá de cada una, de encontrar lo que nos hace sentir cómodas, en intimidad, en conexión con nuestro bebé, seguras, protegidas, acompañadas.”