Sostuvo que su país tiene el deber de «construir el futuro con la conciencia de su eterna responsabilidad». Estuvieron presentes los primeros ministros de Rusia, Francia, Italia y Suecia.
El Gobierno de Angela Merkel realizó una dura autocrítica por los ataques de su país en 1939 sobre Polonia que desataron la Segunda Guerra Mundial. El mea culpa se dio en la ceremonia por el 70mo aniversario del comienzo del enfrentamiento bélico más sangriento de la historia.
«Rindo homenaje a los 60 millones de personas que perdieron la vida a causa de esta guerra que desencadenó Alemania. Me inclino ante las víctimas», enfatizó Merkel. Asimismo, reconoció que no se podrán «borrar las atrocidades de la Segunda Guerra Mundial» y que su país tiene el deber de «construir el futuro con la conciencia de su eterna responsabilidad».
También asistieron a la ceremonia de homenaje los primeros ministros de Rusia, Vladimir Putin; de Francia, François Fillon; de Italia, Silvio Berlusconi, y de Suecia, Fredrik Reinfeldt. El lugar donde se congregaron fue al pie del monumento dedicado a los defensores polacos de la fortaleza de Westerplatte, la primera atacada por el Ejército alemán.
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www.clarin.com/diario/2009/09/02/elmundo/i-01990428.htm
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criticadigital.com/impresa/index.php?secc=nota&nid=30116
