Li Guojun es granjero de profesión, pero su pasión por los juguetes militares lo llevó a construir tanques totalmente funcionales en tamaño real. A pesar de que no sabe mucho acerca de la ingeniería militar y sin tener siquiera acceso a Internet, se las arregló para construir sus propios tanques mediante la observación de los modelos que compró en una tienda de juguetes local. Los dos vehículos tienen 6 metros de largo, una velocidad máxima de 20 kilómetros por hora, y pueden hacerle frente a casi cualquier tipo de terreno.
«Para ser honesto, no era tan difícil de hacer», dijo el humilde campesino. «Yo simplemente necesitaba construir las mismas partes que tenía el modelo, pero mucho más grandes». Li contó con un poco de ayuda de un amigo entusiasta. Construyeron los tanques juntos y ahora pasan su tiempo libre conduciendo los vehículos fuera de su aldea en el condado Kangping, en la provincia nororiental china de Liaoning.
Li dijo que la primera vez que vio un tanque fue en una película cuando era un niño, y se enganchó inmediatamente. «Recuerdo que fui al cine con mi abuela y ver a un tanque en la gran pantalla en una película de guerra fue espectacular y me quedé muy impresionado», recordó. «No pagar un modelo, así que me hice uno de madera y supongo que allí es donde empezó todo. Mientras que otros renuncian a las pasiones de la infancia, yo me metí más y más en la mía».
Pero la construcción de un tanque funcional no es tan fácil como hacer una maqueta de madera y Li admitió que hubo varios intentos fallidos que terminaron desguasados o reciclados. Finalmente tuvo éxito con sus últimos modelos, «008» y «009», que han cumplido su sueño de toda la vida: ser dueño de tanques que funcionan por completo.
