Una niña scout de San Francisco comenzó un original emprendimiento: puso un puesto de galletitas afuera de un dispensario legal de marihuana.
Su nombre es Danielle Leit instaló el stand frente a la tienda de Greenn Cross, en la ciudad de California. Está comprobado científicamente que la marihuana estimula el apetito y que después de ser consumida provoca un hambre voraz. La joven le contó a los dueños del negocio que ha vendido 560 cajas de su producto en sólo cuatro días, y dijo que jamás hubiese vendido esa cantidad si no lo hacía frente a su local.
Después del éxito de iniciativa, tropas de niñas scout de otros estados donde la sustancia ha sido legalizada comenzaron a investigar la idea para implementarla.
