Una anciana ucraniana de 79 años se inscribió en un entrenamiento de combate civil, con el fin de prepararse para «defender» a su familia y su hogar en caso de una posible invasión rusa.
Valentyna Konstantynovska es una de los muchos civiles que están perfeccionando sus habilidades con las armas como parte del entrenamiento de defensa personal, a medida que se avecina la amenaza de guerra con sus vecinos rusos.
Los miembros de la unidad de Fuerzas Especiales de Ucrania realizaron entrenamiento militar para los residentes en Mariupol, en la región de Donetsk, el pasado domingo, mientras los líderes mundiales mantienen conversaciones de última hora con Vladimir Putin en un intento por calmar las tensiones.
El batallón, parte de la Guardia Nacional de Ucrania, está entrenando a los residentes para armar y desarmar un arma, cargar municiones y apuntar a objetivos, mientras Rusia acumula aproximadamente 130.000 soldados en su frontera.
La bisabuela Valentyna, de Mariupol, dijo que está dispuesta a dar un paso al frente en el peor de los casos, porque no quiere perder su casa.
«Estoy lista para disparar. Si algo sucede, defenderé mi hogar, mi ciudad, mis hijos», dijo la anciana. «Lo haré porque creo que estoy lista para ello. No quiero perder mi país, mi ciudad».
