Las violentas protestas convocadas ayer por el grupo islámico Hezbollah en el Líbano terminaron con tres muertos y más de 100 personas heridas.
Los seguidores de Hezbollah realizaron una masiva huelga general contra el gobierno pro occidental del primer ministro Fouad Siniora, que incluyó bloqueos de rutas y cruentos enfrentamientos con partidarios oficialistas.
Hezbollah lanzó, hace dos meses, una campaña para derrocar a Siniora, que es respaldado por Estados Unidos y otras potencias occidentales.
«Permaneceremos unidos ante la intimidación y enfrentaremos a la sedición por el bien del Líbano», afirmó anoche el premier libanés.
Sin embargo, la oposición advirtió que llevarán adelante medidas más duras si el gobierno no cede a sus demandas, entre ellas, mayor acceso al poder y elecciones generales anticipadas.
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www.lanacion.com.ar/EdicionImpresa/exterior/nota.asp?nota_id=877754
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www.clarin.com/diario/2007/01/24/elmundo/i-02601.htm
