En un hecho todavía confuso, un militar iraquí mató a balazos a dos soldados norteamericanos e hirió a otros tres y a un intérprete civil. Se presume que se trató de un terrorista infiltrado en las fuerzas de seguridad.
El hecho se produjo durante una patrulla conjunta entre militares iraquíes y estadounidenses en la norteña ciudad de Mosul, el 26 de diciembre. La información se conoce recién ahora porque desde entonces el alto mando norteamericano viene realizando investigaciones para dilucidar el caso.
Durante una recorrida de seguridad, la patrulla, compuesta de soldados de Estados Unidos e iraquíes, fue atacada por francotiradores, oportunidad en la que uno de los efectivos de nacionalidad iraquí aprovechó la ocasión y con su arma mató al capitán Rowdy J. Inman, de 38 años, y del sargento Benjamin B. Portell, de 27. También hirió a otras tres personas.
Posteriormente escapó pero fue apresado al poco tiempo. Las primeras investigaciones se orientan hacia la hipótesis de que la insurgencia suní habría logrado infiltrar las filas del ejército de Irak.
Más información
www.elpais.com/articulo/internacional/elpepuint/20080106elpepiint_7/Tes
www.elcomercio.com.pe/ediciononline/
www.clarin.com/diario/2008/01/06/elmundo/i-02703.htm
