El embajador norteamericano, Earl Wayne, entró a la Casa de Gobierno por primera vez desde que Cristina Kirchner es presidente. Ayer lo hizo para reunirse con el Jefe de Gabinete, Alberto Fernández.
En la reunión se terminaron de limar asperezas en torno a la polémica derivación del caso Antonini Wilson, que según la justicia norteamericana, implicaría de algún modo al gobierno argentino. Es que la investigación en Miami apunta a que los 800 mil dólares que quiso ingresar el empresario norteamericano eran para financiar la campaña presidencial kirchnerista.
Esto derivó en cruces diplomáticos, con las autoridades argentinas acusando a los Estados Unidos de armar una operación para perjudicar la relación con Venezuela. Como contrapartida, empezó a demorarse la entrega del plácet al designado embajador en Washington, Héctor Timerman, y el responsable del Departamento de Estado para América Latina, Tom Shannon, suspendió un anunciado viaje a Buenos Aires.
En su reunión con Fernández, Wayne descontó que pronto se dará el plácet a Timerman y que Shannon reprogramará su visita a la Argentina. Por el lado argentino, se dio vía a su pedido de entrevistarse con la presidente: mañana, Cristina Kirchner recibirá a Wayne.
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www.clarin.com/diario/2008/01/30/elpais/p-00701.htm
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