Luego del “supermartes”, la primera consecuencia política se dio en las filas del Partido Republicano. Mitt Romney, segundo en cantidad de delegados obtenidos, decidió bajarse de la carrera.
La decisión del ex gobernador de Massachussets allana el camino para la nominación del senador John McCain, cómodo en cantidad de delegados, al punto que triplica los obtenidos por Mike Huckabee. El ex gobernador de Arkansas queda como el único oponente de McCain para la nominación.
Mormón ultraconservador, Romney gastó 35 millones de dólares de su bolsillo en la campaña. Jamás llegó a conectar del todo con los votantes, según los analistas, y en más de un sentido era visto como un oportunista que cambiaba sus puntos de vista según la ocasión.
«Les doy la bienvenida a mi campaña», se dirigió McCain a los seguidores de Romney. El veterano de Vietnam parece tener ahora la nominación en su bolsillo, si bien le jugaría en contra su edad, 71 años, y el hecho de que puertas adentro de su partido es visto como un heterodoxo.
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www.clarin.com/diario/2008/02/08/elmundo/i-02001.htm
www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-98639-2008-02-08.html
www.lacapital.com.ar/contenidos/2008/02/08/noticia_0059.html
