Los últimos dos meses fueron movidos para el Gobierno nacional, pero de muy poca exposición pública; las circunstancias así lo exigían: al conflicto con Estados Unidos previo escándalo de la valija, y los siempre presentes temas de la inflación y la crisis energética, se sumó en la última semana las movidas del ex mandatario Néstor Kirchner para quedar al frente del PJ. Para la flamante presidenta Cristina Fernández no era momentos para exponerse.
Sin embargo, un Gobierno que no se muestra tampoco es muy conveniente, políticamente hablando. Así parecen haberlo entendido en la Casa Rosada, y especialmente en la residencia presidencial de Olivos.
Según indica el diario La Nación en su edición dominical, esta semana el círculo político más cercano a la presidenta debatió seriamente cómo darle agilidad a una gestión que en 60 días parece haber quedado desdibujada. Según el matutino, es por eso que se confirmó en los últimos días que Cristina Fernández viajará a Gran Bretaña, en abril; a Perú en mayo, y a República Dominicana, en marzo. También trascendió que habría intenciones de realizar una visita a Estados Unidos, sin fecha aún.
Por lo pronto, los hábitos de gobierno han variado sensiblemente, según la gente que frecuenta la Casa Rosada y algunos ministerios. Por caso, los horarios de trabajo de la presidenta son diametralmente opuestos a los que hacía su marido, pero más notorio aún es su carácter: se dice así que ella es más proclive al diálogo, escucha opiniones diferentes y de aquí en más se propuso no minimizar problemas.
Hasta aquí lo que, se espera, hará “visible” a la gestión cristinista en los próximos días. Después, quien atiende los conflictos locales “desde las sombras”, según La Nación, es Néstor.
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www.diarioperfil.com.ar/edimp/0233/articulo.php?art=5671&ed=0233
www.clarin.com/diario/2008/02/10/elpais/p-00401.htm
