El Parlamento de Kosovo procederá a declarar hoy la independencia del país, según aseguró el sabado su primer ministro. Mientras que Estados Unidos apoyará la proclama, Serbia, Rusia y España, entre otros, se oponen.
El flamante premier Hashim Taci, anunció que la proclamación se hará hoy y de manera unilateral. Posteriormente se deberán seguir una serie de pasos formales y diplomáticos para efectivizar la independencia.
La Unión Europea ya puso en marcha su misión EULEX, a través de la cual enviarán a territorio kosovar a dos mil funcionarios entre administrativos, técnicos en informática y policías, con el objetivo de acompañar el proceso. Estados Unidos, en tanto, apoyará diplomáticamente la independencia.
Sin embargo, la movida en los Balcanes generó un gran debate en la comunidad internacional y encontradas posiciones. Es que una independencia con estas características podría generar un precedente importante que lleve a un efecto dominó de numerosas regiones con características poblacionales similares.
Kosovo es considerada como la cuna de Serbia, sin embargo tienen una población mayoritariamente albanesa, lo que le permite hoy buscar su independencia de Belgrado. Es por ello que España, por caso, se opone a la iniciativa en temor a que los ánimos en el País Vasco tomen derroteros similares. Y Argentina deberá seguir un cuidadoso camino diplomático en vistas a que las Islas Malvinas son territorialmente argentinas pero tienen una población mayoritariamente británica.
Europa históricamente temió los cambios en la zona de los Balcanes porque suelen acarrear sangrientos conflictos. Sin embargo, esta vez, la Unión Europea parece apoyar silenciosamente la independencia de Kosovo. Del otro lado, Serbia prometió no olvidar que ese territorio le pertenece, en tanto Rusia ya levantó la voz a nivel diplomático y mediático rechazando una movida geopolítica que daría pie a un efecto dominó en su zona de influencia.
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www.elpais.com/articulo/internacional/elpepuint/20080217elpepuint_1/Tes
www.lavanguardia.es/lv24h/20080217/53436985298.html
www.elmundo.es/elmundo/2008/02/17/internacional/1203225475.html
