Los militares uruguayos comprometidos en violaciones a los derechos humanos cometidas en los años de la dictadura (1973-1985), no podrán acogerse a una norma que los beneficiaba con no develar datos ante la justicia. Así lo determinó el presidente Tabaré Vázquez junto a su ministro de Defensa, Azucena Berrutti.
De esta forma, ante cualquier requisitoria judicial, los militares amparados en esta norma, deberán presentarse a declarar. Bajo el secreto de estado, en algunos casos, se negaban a dar información. Ahora, no podrán esgrimir esto ante los tribunales. “La idea es liberar la conciencia de aquellos que quieran hacer algún aporte y no pueden hablar porque su ética militar se lo impide”, afirmó Berrutti.
La nueva norma establece que. “todo el personal integrante o que hubiera integrado el Ministerio de Defensa queda relevado del secreto militar que hasta ahora había amparado la información relacionada con la violación de los derechos humanos sucedidos entre el 1o de enero de 1968 y el 28 de febrero de 1985”. Con todo, la medida incomoda a veteranos de la dictadura, como el ex jefe de Inteligencia Iván Pauls. “El ejército está siendo objeto de humillaciones”, aseguró. Agregó que “Silveira morirá y se convertirá en una nueva víctima de la guerra psicopolítica que está realizando el gobierno para con las fuerzas armadas”, en alusión a la huelga de hambre que inició el coronel retirado Jorge Silveira.
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www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-99724-2008-02-27.html
www.clarin.com/diario/2008/02/27/elmundo/i-02015.htm
www.prensalatina.com.mx/article.asp?ID=%7BA5336E44-34D5-4299-9D6C-5ED345F98CF5%7D)
